Los aceros inoxidables se usan en gran número de aplicaciones debido a su resistencia a una gran diversidad de medios corrosivos y porque conservan su aspecto brillante e inalterable en la mayoría de las condiciones normales de servicio.
La elección de un tipo determinado de acero inoxidable se hace en base a sus contenidos en Carbono, Cromo, Níquel y de un determinado número de otros elementos, como pueden ser el Titanio, Niobio, Molibdeno, Vanadio etc. ya que la experiencia y los ensayos han demostrado que un metal de tal composición resiste al ataque del medio o de los medios que va a ser sometido.
Junto con la elección del tipo de acero, también se tiene que hacer la elección del ACABADO SUPERFICIAL el cual esta clasificado según American Iron and Steel Institute (AISI).
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