A menudo nos enfrentamos a muchas preguntas y conceptos erróneos acerca de las formas y perfiles del acero inoxidable. El hecho es que este gran producto tiene muchos tipos de composiciones, aleaciones y fortalezas.
Sin embargo, no todos los productos de acero inoxidable tienen las mismas propiedades. Por lo tanto, en el siguiente artículo de JN Aceros, desmentiremos algunos conceptos erróneos de la mejor manera posible.
Todas las aleaciones son iguales
Hay cinco categorías básicas de acero inoxidable, cada una con diferentes grados. Las aleaciones son metales que se hacen combinando dos o más elementos metálicos.
Dentro de cada categoría, las calificaciones se identifican por números, los cuales son una indicación de las aleaciones que componen parte de cada material. Por ejemplo, la serie 300 contiene cromo y níquel y la serie 400, no.
Las categorías básicas de acero inoxidable se clasifican en:
- Ferrítico: Es una aleación de cromo y carbono que es resistente al agrietamiento por corrosión bajo tensión y es a menudo utilizado para las aplicaciones cerca al agua del mar. Esto se limita a las secciones más delgadas que no requieren soldadura.
- Austenítico: Este es uno de los tipos más comunes de acero inoxidable. Incluye carbono, nitrógeno, níquel y manganeso. Este acero es resistente a la corrosión cuando se agregan cromo y molibdeno.
- Martensítico: Esta aleación incluye cromo con mayores niveles de carbono. Se utiliza principalmente para láminas y placas.
- Dúplex: Esta categoría presenta mayor resistencia que otros tipos de acero inoxidable. También es resistente al agrietamiento por corrosión bajo tensión.
- Endurecimiento por precipitación: Cuando se agrega niobio, cobre y aluminio, el acero inoxidable endurecible por precipitación puede desarrollar una resistencia muy alta. La resistencia a la corrosión de esta aleación es similar al acero austenítico regular.
No es magnético
Si alguna vez has intentado acercar un imán a un producto de acero inoxidable, notarás que no será atraído. Eso es porque ciertos aceros son más magnéticos que otros.
Cuatro de los cinco tipos básicos anteriormente mencionados tienen algunas propiedades magnéticas. Los ferríticos, martensíticos, dúplex y endurecidos por precipitación tienen cierto grado de magnetismo. El acero austenítico es el único que no es magnético.
No se oxida
De hecho, el acero inoxidable puede oxidarse con el tiempo. Hay tantos grados y composiciones de este material: algunos son más susceptibles a la corrosión y al óxido que otros.
Básicamente, las aleaciones con mayores cantidades de cromo son más resistentes a la corrosión.
También hay factores ambientales para tener en cuenta. La exposición a sustancias químicas, agua salada y lluvia ácida puede afectar a la mayoría de los aceros. Sin embargo, el acero inoxidable es menos propenso a corroerse y oxidarse que el acero al carbono.
Es difícil de limpiar
El acero inoxidable es uno de los materiales más fáciles de limpiar. Hay una razón por la que se llama «inoxidable». Sí, algunos acabados podrían presentar rastros de huellas opacas de dedos y manos. Sin embargo, estos son tan fáciles de limpiar que solo necesitas agua y jabón, y recuperarás brillo.
El acero inoxidable es considerado uno de los materiales más higiénicos debido a su fácil limpieza y esterilización. Es por eso que es un material estándar para cocinas comerciales y equipos médicos.
No es reciclable
El acero, en general, es uno de los materiales más sostenibles porque es 100% reciclable. Los elementos de construcción de acero se pueden reutilizar, lo que los convierte en una opción responsable en dicho sector.
Luego de ciertos procesos de fabricación, como el corte, los residuos se recolectan y reciclan para usarlos en la fabricación de otras piezas.
En JN Aceros, compartiremos contigo todos la información relacionada al acero inoxidable. Además, tenemos para ti toda una variedad de productos hechos de acero inoxidable. Si tienes alguna consulta, no dudes en escribirnos a través de nuestro formulario de contacto.
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