¿Cómo proteger el acero inoxidable de la corrosión ambiental?

por | Ago 17, 2020 | Aceros Inoxidable

La corrosión ambiental es un deterioro químico natural que ocurre debido a una reacción con el medio ambiente y, en especial, con el oxígeno. El grado de deterioro de un metal dependerá en gran medida de su naturaleza química. Por ejemplo, cuando el hierro se expone a una atmósfera industrial durante un período de tiempo, se forma óxido de hierro o corrosión en la superficie. Ya que el óxido es muy poroso al oxígeno y al agua de la atmósfera, el proceso de corrosión continúa hasta que el metal se consume por completo.

En general, se asume que el acero inoxidable tiene una muy buena resistencia a la corrosión atmosférica y a la humedad; sin embargo, al analizar el efecto de la corrosión general sobre el acero, se debe prestar mucha atención al entorno. Dependiendo de tu ubicación (rural, industrial, marina o su combinación), la corrosividad puede ser significativa.

En el siguiente artículo de JN Aceros, te hablaremos más sobre la corrosión ambiental o atmosférica, así como algunos consejos que deberías seguir si usas acero inoxidable en entornos corrosivos.

¿Qué es la corrosión atmosférica?

La corrosión atmosférica es un proceso electroquímico en la que se forma una capa delgada de humedad o electrolito sobre una superficie del metal. Algunas ubicaciones con alta contaminación industrial en la atmósfera pueden tener una presencia significativa de óxidos de azufre o de nitrógeno, sulfuro de hidrógeno, amoníaco, sulfuro de carbonilo y otros contaminantes que amplifican la acidez de las lluvias y, como resultado, la deposición de esos contaminantes en la superficie del metal.

En conjunto con algunos factores ambientales como el alto nivel de humedad o temperatura, ya sea ambiental o debido a la radiación solar, lluvias frecuentes y demás, las tasas de penetración de la corrosión pueden conducir a una pérdida en el espesor del metal.

Al final, los factores ambientales pueden provocar una pérdida de espesor media de hasta un 50% o más en algunos casos extremos.

También te interesará: ¿Cuál es el proceso de fabricación de los tubos y tuberías de acero inoxidable?

¿Cómo cuidar las superficies de acero inoxidable?

Mantén todo limpio y seco

El agua y la humedad son el enemigo número uno cuando se trata de óxido, porque es el oxígeno en las moléculas del agua el que se combina con el hierro para formar óxido de hierro. Debido a ello, los metales que se dejan al aire libre como las estructuras, las puertas o los tanques tienen más probabilidades de oxidarse. 

Si el objeto está ubicado en un ambiente interior húmedo, como un sótano, instala un deshumidificador. Asimismo, cualquier rastro de barro o suciedad adherida a la superficie puede retener agua, por lo que es importante mantener limpias todas las estructuras y superficies hechas de acero inoxidable.

Ten cuidado de los rayones

Los rayones o grietas expondrán más al acero inoxidable a la corrosión. Esta es la razón por la que el acero laminado en frío es más resistente a la corrosión que el acero laminado en caliente. El proceso de laminado en frío crea una superficie más lisa sin textura que puede atrapar y retener agua para que así el metal no sea fácilmente expuesto.

Aplica una capa protectora

Sumergir objetos metálicos hechos de acero inoxidable, como relojes, en una solución azulada de agua, hidróxido de sodio y nitrato de potasio, proporciona una fuerte resistencia a la corrosión. Los productos de prevención de la oxidación disponibles comercialmente en forma de aerosoles o toallitas de tela también pueden proteger los objetos metálicos, incluidas herramientas, equipo para exteriores, vehículos y piezas metálicas grandes.

Utiliza la aleación correcta de acero inoxidable

Las aleaciones de acero inoxidable a pesar de que contienen hierro, son resistentes a la oxidación porque también contiene un alto porcentaje de cromo que es incluso más reactivo que el hierro. Gracias a que el cromo en las aleaciones se oxida rápidamente para formar una capa protectora de óxido de cromo en la superficie del metal, se puede evitar que el oxígeno llegue al acero subyacente.

Utiliza metal galvanizado

La galvanización es un proceso que se utiliza para preservar el acero sin óxido durante muchos años. Durante este proceso, una pieza de acero se recubre con zinc líquido para que este lo proteja de tres formas diferentes. 

Primero, el recubrimiento de zinc actúa como una barrera que evita que el oxígeno y el agua lleguen al acero. En segundo lugar, incluso si se raya el revestimiento, el zinc continúa protegiendo las áreas cercanas del metal a través de la protección catódica. Y por último, el zinc es altamente reactivo al oxígeno y forma rápidamente una capa protectora que evita que el hierro se oxide.

Mantenimiento regular

Debido a que el óxido se propaga rápidamente, es importante que retires cualquier rastro de corrosión tan pronto como aparezca. Luego, frota con agua tibia y jabón y aplica un acondicionador de metal u otra capa protectora para evitar una mayor oxidación. Si es necesario, aplica una nueva capa de pintura al área.

Con JN Aceros, encontrarás una serie de productos de acero inoxidable de distintos grados. Si tienes alguna consulta sobre nuestras planchas, tubos, accesorios, barras, ángulos, no dudes en comunicarte con nosotros.

0 comentarios

Artículos relacionados