Vivimos en un momento en que el costo de una construcción ya sea comercial o residencial, es considerablemente mayor que antes. El valor de los materiales, el costo de la mano de obra, los precios del seguro y la tasa de impuestos varían dependiendo del lugar y del tiempo. Como las construcciones son algo que no pueden evitarse, los expertos de todo el mundo están ofreciendo soluciones variables a los problemas que enfrentan los constructores hoy en día con respecto a los costos y beneficios. Se puede, por ejemplo, usar materiales y mano de obra más baratos para construir una casa, pero no garantizarás la longevidad y la confiabilidad de dicho edificio. A largo plazo, esta puede ser la opción más costosa, ya que dentro de unos años se deberán aplicar reparaciones y reemplazos, probablemente esta vez con opciones más costosas que antes.

Sin embargo, si haces tus cálculos correctamente y consideras la relación costo-beneficio de los materiales y la mano de obra, tu proyecto tendrá muchas más posibilidades de durar décadas, incluso siglos, con problemas mínimos de mantenimiento.

Tomemos, por ejemplo, el uso del acero inoxidable en la construcción. El uso de este material ha sido una práctica preferida durante mucho tiempo. Y, con las tecnologías ahora empleadas en el acero inoxidable, esta aleación es aún más fuerte y más confiable que antes.

Algunos ejemplos de la aplicación de acero inoxidable en la construcción son:

• Techos
• Puentes peatonales
• Fachadas de edificios
• Puertas de protección contra incendios
• Pasamanos
• Revestimientos arquitectónicos
• Balaustradas o barandillas
• Productos para el alcantarillado y el agua de lluvia
• Soportes de pared
• Vallas

Quizá haya cientos o incluso miles de productos a base de acero inoxidable utilizados en la construcción; el punto es que el acero inoxidable es un material de referencia para diferentes usos en la arquitectura. La razón principal para usar acero inoxidable es su confiabilidad. Los beneficios de este tipo de material:

• Facilidad de limpieza o pulido
• Fuerza duradera
• Personalización o facilidad de configuración
• Resistencia a la corrosión
• Resistencia a los contaminantes
• Alto nivel para ser reciclado
• Visualmente atractivo

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En general, el usuario se beneficia del acero inoxidable a largo plazo porque les ayuda a ahorrar dinero. Es más resistente, por ejemplo, que el vidrio y otros materiales para el revestimiento, y requiere muy poco mantenimiento en comparación con sus contrapartes. Puede haber material más fuerte, pero son intrínsecamente más pesados, menos personalizables y más costosos.

Otra razón por la que el acero inoxidable es una opción perfecta para muchos requisitos de construcción es su bajo impacto en el medio ambiente. Estudios han otorgado a los productos que contienen acero inoxidable una calificación A o B para la mayoría de las categorías. Son más favorables que otros materiales para los mismos fines. Esto significa que los mejores tipos de acero inoxidable tienen una baja calificación de emisiones de CO2 durante la producción y son altamente reciclables.

Es posible que no puedas percibir fácilmente los ahorros cuando utilizas acero inoxidable dentro del sector de la construcción, pero después de algunos años te darás cuenta de su valor real. Otros materiales podrían requerir un mantenimiento más costoso o incluso reemplazos, mientras que el acero inoxidable sigue siendo fuerte, prácticamente ajeno a los cambios climáticos que tienen lugar a su alrededor.

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